miércoles, 2 de julio de 2014

LOCAMENTE ENAMORADO

Hola a todos.
Este fragmento de Locamente enamorado es bastante corto.
Pero vemos cómo Dillon inicia el viaje que le llevará de vuelta a casa.

                            Dime que estoy haciendo lo correcto, Sam, pensó Dillon apoyado en la barandilla del barco que le llevaba de vuelta a Estados Unidos.
                           Se sentía demasiado viejo y cansado para empezar de nuevo. Hacía unos días que había zarpado del puerto de Londres el Lucy, el barco para que el Dillon había comprado pasaje.
                           Sin embargo, el miedo se estaba apoderando de él. Sentía que no era quién para entrar de nuevo en la vida de Rose. Después de todo, a lo mejor, ella ya le había olvidado.
                           A lo mejor, habría rehecho su vida. Se habría casado.
                          Tendría hijos.
                           Dillon paseó de un lado a otro de la cubierta. No podía sacarse a Rose de la mente, pero tampoco podía sacársela del corazón.
                           Lo único que deseaba era volver a verla. Sabía, por la carta que le había escrito su padre, dónde vivía.
                            Sean viajaba mucho por todo el Oeste. Buscaba cabezas de ganado. Caballos...Y se enteraba de muchas cosas. Había visto a Rose y a sus hermanas. Las cinco hermanas mayores seguían estando solteras. Jasmine no quería casarse. Decía que el amor sólo hacía sufrir.
                           Rose se había acostumbrado a aquella clase de vida. Entonces, seguiría estando soltera. Dillon no quería ser egoísta. Rose merecía algo mejor que él.
                           ¿Qué le diré cuando la tenga delante?, se preguntó así mismo Dillon. ¿Cómo le voy a decir todo lo que siento por ella?
                          Se estaba arrepintiendo de haber abandonado Londres. Sin embargo, no podía dar marcha atrás. Debía de seguir adelante. Y ver a Rose.
                          Sólo Dios sabía lo que podría pasar entre ellos. Las dudas se agolparon en la mente de Dillon. Rose podría no querer saber nada de él. Podría echarle.
                           Se le revolvió el estómago. Le aterraba pensar que Rose había dejado de amarle. Entonces, nada tendría sentido para él. Rose...

 

                      Aquel amor seguía dentro de su corazón. Guardado como el mayor de los tesoros...

2 comentarios:

  1. Uy que romántico que bien que le hizo caso a Amanda , espero que todo marche bien te mando un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Citu.
      No sé cuándo volveré a subir un fragmento de esta historia.
      Espero que sea pronto.
      Un fuerte abrazo y me alegro de que te esté gustando.

      Eliminar